Hasta pronto, querido Carlos

By on junio 21, 2018

Han pasado varias horas desde que me enteré de la noticia y sigo incrédulo. Unas líneas escritas al wasap me lo anticiparon. No lo quise creer. Pero cuando Rolando Rodrich me lo confirmó, me sobrevino una pena terrible por la partida de tan querido amigo. Porque más allá de haber sido durante muchos años el gerente general de la Cámara de Comercio y Producción (Camco) y un piurano de bien, Carlos Sánchez Delgado fue para mí un gran amigo, aquella persona que me extendió los brazos y me brindó su amistad, camaradería y sapiencia a las pocas semanas de haber llegado a Piura a dirigir El Tiempo en el 2014.

Siempre de buen humor, de risa fácil y contagiante, la seriedad, empero, lo embargaba cuando de defender a su querida Piura se trataba. Aprendí a querer, respetar y defender esta tierra en las largas jornadas de trabajo que compartí con él durante las sesiones del Comité Cívico por Piura, o de innumerables reuniones a las que me convocaba.

Conversador nato, de una sapiencia y cultura envidiable, era un gran placer compartir largas tardes de conversaciones, discusiones e intercambios de ideas en las que nos fuimos haciendo grandes amigos. Solo nos separaba el color de nuestras camisetas peloteras: él la blanquiazul, yo la crema.

Pocos días después de dejar la dirección de El Tiempo, lo visité en su oficina. Entre varios temas, le conté de un proyecto que me estaba rondando la cabeza. Ni bien escuchó la idea, fue el más entusiasta impulsor de que la llevase a cabo. Salí de su oficina convencido, contagiado por su entusiasmo, por su empuje.

Cuando lo invité a ser parte de elpiurano.pe como columnista y miembro del Consejo Consultivo, no lo dudó ni un segundo. “En honor a la verdad” fue el título que escogió para su columna semana de los miércoles, la cual enviaba puntualmente cada martes.

Estuvo con nosotros el día del lanzamiento oficial, haciéndonos reír con sus clásicas bromas y chistes. Siempre alegre, bonachón, campechano.

Hoy que ya no está con nosotros, solo queda recordarlo como el gran hombre que fue para Piura, para su familia, para la Camco y para quienes lo conocieron.

En honor a la verdad, querido Carlos, fue un gusto y un honor haberte conocido. Hasta pronto, amigo.

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